Factores a tener en cuenta en la motivación de los niños con TDAH
Un de los grandes problemas del TDAH es la dificultad que presentan estos niños para tener una adecuada regulación interna de su motivación, entendiendo esta como el hecho de hacer algo hoy para conseguir una gratificación mañana.
La motivación es por sà sola un sentimiento que nos impulsa para tener presentes los objetivos que queremos conseguir y teniendo unas expectativas de éxito.
Para los niños con TDAH, cuando se les presenta una tarea poco apetecible les produce un rechazo a su realización, lo que impide mantener los objetivos que se quieren conseguir por muy importantes que sean.
Por ello, es imprescindible que los padres entiendan y sean capaces de motivar a sus hijos para que sean capaces de persistir en las tareas y por consiguiente, conseguir los objetivos propuestos.
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Por término general, los niños con TDAH no pueden tener una autoestima alta ya que desde que se levantan es muy probable que vayan experimentando fracaso tras fracaso: en el colegio, durante las comidas, etc.
En esta autoestima y en esta motivación bajas de las que hablamos, influye efectivamente una serie de factores en función de la competencia que presente el niño hacia ellas. Veamos alguna de estas:
Las atribuciones: son las razones y causas que percibimos como responsables de nuestros resultados.
Las atribuciones tienen tres tipos de dimensiones:
Dimensiones de localización:
Podemos atribuir la causa de los resultados a factores internos o externos. Son factores internos la capacidad y el esfuerzo, son factores externos la suerte y la dificultad de la tarea.
Dimensiones de variabilidad:
Se refiere a si la causa se percibe como estable o variable. La capacidad se suele considerar como estable, mientras que el esfuerzo o la suerte son variables.
Dimensiones de controlabilidad:
Se refiere al grado en que las causas se pueden controlar o no por parte del individuo. Si pienso que mi fracaso se debe a la mala suerte, al profesor o a la dificultad de la tarea, entonces la situación no está bajo su control, se desmotiva porque no puede hacer nada. Si atribuyo el éxito a factores controlables, puedo estar más motivado para el futuro porque sé qué debo hacer, sé que lo puedo hacer, sé que depende de mÃ.
La motivación aumenta si atribuimos los éxitos a factores internos y preferentemente estables como la capacidad del niño para enfrentarse a algo. Por otra parte la motivación disminuye cuando el sujeto no se responsabiliza de sus éxitos porque los atribuye a factores externos e incontrolables como la suerte, asà como cuando atribuye los fracasos a causas estables e incontrolables como la capacidad.
RocÃo Meca MartÃnez
Especialista en PedagogÃa Terapéutica de Fundación CADAH.
BibliografÃa:
MartÃnez MartÃn, M ª.A. "Todo sobre el TDAH. GuÃa para la vida diaria" Ed. Altaria (2013)
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