Trastorno de aprendizaje no verbal: disfuncionalidad social y ejecutiva
El trastorno de aprendizaje no verbal (TANV) o trastorno procedimental es un trastorno de base neurobiológica que se caracteriza por una disfunción específica en las habilidades motrices, de coordinación, visuoespaciales/visuoconstructivas y por dificultades en las relaciones sociales, en sujetos con una inteligencia general y habilidades lingüísticas óptimas.
En la infancia, los niños presentan alteraciones en la psicomotricidad y en tareas de dibujo, plástica y cálculo; en la edad adulta, los afectados presentan dificultades para establecer relaciones familiares, de amistad y de pareja, problemas en la convivencia, en la autonomía personal y en el rendimiento laboral.
Con frecuencia existe una alta predisposición a padecer problemas psicológicos (afectivos, emocionales, sociales) como consecuencia del gran impacto del trastorno en la vida del afectado.
Impacto del TANV en el ámbito social
El área socio-emocional una de las áreas de mayor afectación, debido a las grandes dificultades sociocognitivas y de cognición social que presentan:
Estas dificultades en el área social vienen derivadas m por una comunicación no verbal deficitaria y dificultad para comprender las claves no verbales de la relación social, como ciertas sutilezas de la interacción, dobles sentidos, miradas, ironía, sarcasmo, bromas, reconocimiento de emociones, interpretación de gestos y expresiones corporales o la incapacidad de ponerse en lugar del otro (empatía). Con frecuencia esta dificultad para detectar señales sociales da lugar a interpretaciones erróneas o malos entendidos.
Los afectados por TANV tienden a hablar mucho, pero no siempre lo hacen de una manera socialmente apropiada. También pueden presentar un todo de voz o prosodia peculiar.
Los afectados por TANV no suelen mostrar conductas desafiantes y/o disruptivas, imposición a las normas, desmotivación... pero suele ser frecuente la aparición de conductas rígidas, persistentes, perseverativas, carentes de lógica, y en ocasiones, estas dificultades les llevan a manifestar altos niveles de frustración que en muchos casos no saben gestionar.
A menudo, los afectados por TANV son percibidos como raros o inmaduros, debido a su torpeza ejecutiva y su falta de destreza a la hora de resolver situaciones aparentemente sencillas, así como su falta de "perspicacia social" y bajo insight.
Por el contrario, cuando la persona con TANV va tomando conciencia de sus dificultades, tiende a evitar los grupos sociales grandes y la interacción con personas nuevas, con tendencia a aislarse y no salir de su zona de confianza; evitan viajar, acudir a fiestas y reuniones, estar con determinadas personas que les resultan difícil de interactuar, situaciones novedosas, etc.), dando lugar en ocasiones a la aparición de problemas de ansiedad anticipatoria, fobias, aislamiento, síntomas depresivos, sentimientos de baja competencia y valía personal, etc.
Impacto del TANV en el día a día (ACVD)
A pesar de que no todos los afectados presentan los mismos déficits ni el mismo grado de afectación, en las personas con TANV el rendimiento ejecutivo diario se ve afectado por la mala adquisición de las principales habilidades funcionales: habilidades conceptuales, habilidades motoras, habilidades visoespaciales, habilidades sociales y pensamiento abstracto.
Estos déficits se aprecian especialmente a la hora de establecer conductas rutinarias, secuenciales o establecimiento de hábitos y comportamientos automáticos debido a sus déficits en el aprendizaje procedimental automático (tardan más tiempo en automatizar ciertos aprendizajes y requieren de más práctica al inicio de los aprendizajes). Los afectados de TANV pueden tener respuestas conductuales a excesivamente lentas.
Esto supone un problema en las actividades diarias ya que emplean mucho tiempo a la hora de hacer las tareas (estudiar, responsabilidades del hogar, autonomía personal...), además de presentar una marcada torpeza motriz y manual. La problemática en estos casos a la hora ejecutar las tareas no sería por un problema de razonamiento, distractibilidad o de falta de concentración en la tarea como en el caso de los afectados por TDAH, sino más bien a un problema procedimental y de capacidad psicomotriz y dificultad para procesar la información escrita y visual.
Tratamiento del TANV
El tratamiento del TANV debe enfocarse desde la perspectiva multimodal debido a la necesidad de intervenir sobre casi la totalidad de las áreas del afectado:
La detección precoz y la intervención temprana son factores clave para alcanzar una mejoría funcional y una mejor evolución del trastorno.
Sara Ortega Tapia, Neuropsicóloga de Fundación CADAH (2018).
BIBLIOGRAFÍA
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