TDAH: Actividad para fomentar la Autoestima.
- ¿Por qué trabajar la autoestima en los afectados por el TDAH?:
Los afectados por el TDAH, en la mayoría de las veces, tienen dañada la autoestima a consecuencia de su sintomatología nuclear. Tanto si es debido por su hiperactividad, (tendrá problemas en el aula para seguir las clases, con los compañeros y en casa por su inquietud), como por el déficit de atención (mostrará dificultades académicas), o por la impulsividad, (aparecerán problemas de conducta). Con lo cual, los afectados por el TDAH tendrán en su `mochila socio- emocional` un conjunto amplio de fracasos que hacen que no tengan buen autoconcepto y por ende, muy poca autoestima.
Teniendo en cuenta que es la autoestima la que nos impulsa y nos da energía para seguir con los desafíos y las metas de la vida, fortalecer ésta durante la infancia del afectado por el TDAH es fundamental, para dotarles de seguridad y confianza en sí mismos, y capacidad para aceptar sus fracasos y para asumir nuevos retos y responsabilidades.
- ¿Qué entendemos por autoconcepto y autoestima?
Entendemos el autoconcepto como la imagen que tenemos de nuestras propias cualidades y defectos, de lo que somos y podemos hacer. Esta autoimagen puede gustarnos o no; puede que la aceptemos con naturalidad o que nos resulte odiosa. Esa valoración afectiva que hacemos de nuestro propio concepto o imagen es lo que se denomina autoestima.
La autoestima es muy importante en nuestras vidas, porque influye enormemente en la forma en que nos relacionamos con los demás y en cómo afrontamos nuestro problemas.
Los padres y las madres pueden hacer mucho para mejorar la autoestima de sus hijos. Además, numerosas investigaciones demuestra que la familia es un estamento clave para que los individuos desarrollen una autoestima sana y adquieran plena confianza en ellos mismos y sus capacidades.
- La autoestima en la infancia:
En el caso de los niños, la autoestima está muy mediatizada por las valoraciones de los demás (primero por las valoraciones de los padres; posteriormente y cada vez más, por las de sus iguales). Es por tanto muy importante el papel que tiene aquí la familia, el de la responsabilidad de fomentar una buena autoestima en sus hijos. Los hijos que crecen en familias en las que se aprecian sus cualidades, tienen un mejor concepto de sí mismos y, a la larga, tendrán mayores aptitudes para afrontar los desafíos que se les presenten en la vida y para fijarse metas más elevadas, que los que carecen de este estímulo.
- La autoestima en la adolescencia:
En la adolescencia, los sentimientos de autoestima arrancan igualmente de la visión de los padres, pero cada vez va ganando más peso la opinión que tienen los demás y la concepción que el joven tiene de sí mismo. Los adolescente se observan constantemente y, cuando no les gustan lo que ven, piensan que los demás opinan igual. A esto se suma la insatisfacción que generan los cambios en su propio cuerpo, los cambios en las relaciones con sus iguales (que se vuelven más amenazantes), los cambios en la escuela (que se convierte en un entorno más exigente y competitivo) y la inseguridad ante el inicio de las relaciones sexuales. Su autoestima es un castillo de naipes que cae al primer soplo de aire, y tienen que volver a levantar, una y otra vez, pieza a pieza con ayuda.
Por todo lo dicho, para trabajar el área de las habilidades sociales de los afectados por el TDAH, una de las primeras áreas a desarrollar será el desarrollo afectivo, en el cual se incluye la autoestima. Es muy importante que se fomente en familia, pero si la misma lo refuerzan otros agentes educativos que interactúan con el niño mucho mejor.
Para desarrollar esta actividad debemos plantear a los niños los siguientes objetivos:
- Conocer en profundidad en qué consiste la autoestima y el autoconcepto.
- Desarrollar una imagen positiva de sí mismo y de los demás miembros del grupo.
- Favorecer el conocimiento propio y de los demás.
- Estimular la autoafirmación y la valoración positiva de los demás.
- Mejorar la confianza y comunicación del grupo.
Los materiales que utilizamos en dicha actividad son:
- Un panel de emociones dónde los niños deban colocar su foto en la emoción que sienten cada día.
- Una presentación en power point donde se les expone los conceptos que deben aprender y las actividades que van a desarrollar.
- Y el video `Patito Feo` en el que podrán indagar sobre cómo evoluciona la autoestima del protagonista.
- Posteriormente se les pasará una hoja de preguntas que nos servirá como guía para ver si han entendido y atendido al vídeo, y para ayudarles a reconocer los entresijos de una buena o mala autoestima.
- Lápiz y papel.
El desarrollo de la actividad:
- Comenzaremos mostrándoles el panel de las emociones, donde ellos podrán colocar su foto en la emoción que creen que tienen, consecuencia del trascurso de su día. Aquí veremos, los educadores, la emoción que tienen, y en función de ésta les ayudaremos a ver cómo dicha emoción puede influir en la autoestima.
- Una vez que han identificado su emoción ese día, se les pasará a exponer e ilustrar sobre cuáles son los objetivos a conseguir con esta actividad. Y una vez visto esto les expondremos e ilustraremos sobre en qué consiste el autoconcepto y la autoestima y la importancia de que ésta sea sana.
- Cuando ya se haya expuesto los conceptos básicos sobre el autocencepto y la autoestima, se les dejará ver en vídeo el cuento del `Patito feo`. Aquí ellos podrán ver la evolución de la autoestima del protagonista, y cómo influye en el comportamiento y el pensamiento si esta es sano o no.
- Después de esto, realizaremos a los alumnos un conjunto de preguntas guía las cuales les ayudarán a comprender mejor el vídeo visto. Con estas preguntas, los educadores detectarán la capacidad atencional y de compresión que muestran los niños. Y también, les guiarán para la mejor comprensión de la importancia de tener una autoestima sana.
- Después de analizar con detenimiento el vídeo, desarrollaremos una actividad donde los niños acaben la sesión con la autoestima muy alta. Tendrán que coger un folio y convertirle en un abanico. Una vez que ya tenemos un abanico, ponemos nuestro nombre en la primara cara del mismo. Después se lo vamos a pasar al compañero para que escriba una cualidad que tengamos. Dicho abanico deberá pasar por las manos de todos los componentes del grupo para que anoten cada uno la cualidad que creen que tiene cada dueño de los abanicos. Hasta que finalmente nos llegue nuestro abanico a nuestras manos. Aquí los niños se darán cuenta del conjunto de cualidades y cosas buenas que tienen y en las que destacan, y eso les reportará una buena autoimagen y por consiguiente, una alta autoestima.
- Si nos da tiempo, al final de la actividad, se les pedirá a los niños que dibujen la emoción que les ha provocado realizar esta actividad.
El tiempo de la actividad será aproximadamente de una hora. Si el grupo es muy grande y muy participativo, puede que se necesiten dos sesiones para poder desarrollar la misma.
Es importante que durante el transcurso de la actividad, los educadores les hagamos conscientes a los niños de:
- La importancia que tiene ser siempre positivos en nuestras relaciones con los demás y en lo que pensamos sobre nosotros mismos.
- Tratar de reconocer siempre las cualidades de nuestros compañeros, procurando que se sientan a gusto y así conseguir también estarlo nosotros.
- Que todos somos importantes y valiosos porque tenemos cualidades y cosas positivas.
- Y es muy importante sentirse querido por los demás pero, sobre todo, no se puede olvidar lo importante que es valorarse y quererse uno mismo.
`Las personas que piensan que no son capaces de hacer algo, no lo harán nunca, aunque tengan las aptitudes`.
Indira Gandhi.
Patricia Fernández Briz. Psicopedagoga.
BIBLIOGRAFÍA
Goleman, D. (1995). Inteligencia emocional, Kairós, Barcelona, 1996.
Tierno, B.; Escaja, A.; (2011). Saber educar hoy. Guía para padres y educadores, Ediciones Planeta Madrid, S.A.