El paso de la etapa infantil a la etapa primaria es un cambio de cultura educativa, como dice Mari Carmen Díez Navarro, psicopedagoga de la escuela infantil Aire Libre "ceden una parte del vínculo que hasta ahora reservaban para su padres, vínculo con los profesores, los compañeros, con el colegio, con la cultura".
El cambio de infantil a primaria puede suponer varias implicaciones:
- Muy probablemente cambio de tutor.
- Más profesores de los que están acostumbrados.
- Diferente metodología de trabajo, requiere más concentración, más tiempo sentados, mayor tiempo de escucha activa, mayor carga lectiva...
- Muchas veces supone también un cambio de edificio.
Es frecuente que los niños conciban el paso a primaria desde un punto de vista positivo, ya que se les atribuye un cambio de rol y para casi todos ellos es un elemento reforzador. El cambio no debe enfocarse desde un punto de vista negativo, puede que algunos tengan dificultades para adaptarse y lo conciban como algo dificultoso.
Para el alumnado con TDAH este paso puede ser más dificultoso debido al retraso madurativo que a veces presentan y puede que sea en este momento donde se hagan más latentes sus dificultades de adaptación al entorno escolar por la ausencia de control inhibitorio que a veces presenta y que les lleva, inevitablemente, a tener habilidades sociales escasas.
A nivel legislativo, con el fin de facilitar la transición del alumnado de educación infantil a educación primaria (art. 5 de la Orden EDU/105/2008, de 4 de diciembre, por la que se regula la evaluación de la Educación Infantil en la Comunidad Autónoma de Cantabria) se tendrá en cuenta lo siguiente:
- a) En el caso de que ambas etapas se impartan en el mismo centro, la jefatura de estudios convocará y presidirá reuniones trimestrales de ambos equipos docentes para dar cumplimiento a lo dispuesto en el párrafo anterior.
- b) En el caso de que las etapas se impartan en diferentes centros, durante el último trimestre del curso, las jefaturas de estudios de los centros que impartan educación infantil mantendrán reuniones con las de los centros de educación primaria a los que están adscritos. A estas reuniones se podrán incorporar los tutores y tutoras del segundo ciclo de Educación Infantil y del primer curso de educación primaria, así como el profesorado de la especialidad de orientación educativa correspondiente.
Para ello, el pedagogo Jesús Jarque García ofrece pautas para la familia en pro de la correcta adaptación del niño a la nueva cultura educativa:
- Enviar mensajes positivos y evitar mensajes negativos.
- Durante el verano debemos intentar trasladar mensajes positivos referentes al cambio de etapa, con entusiasmo y centrándonos en las posibilidades de ésta; los nuevos aprendizajes, compañeros, contenidos... Por ello, debemos evitar mensajes del tipo "te vas a enterar cuando llegues a primero", "como te portes así no te van a dejar ir a primero"...
- Esos comentarios no modifican conductas generalizables pero sí calan en la autoestima de los chicos.
- Anticipad de forma realista los acontecimientos.
- Anticipad de una manera realista y entusiasta el cambio de tutor, los nuevos compañeros, el cambio de edificio...
- Es conveniente que también habléis de los deberes y desmontéis mitos sobre ellos del estilo "son muy difíciles", "no voy a poder jugar con tantos deberes"...
- Quitadle importancia a los rumores o comentarios negativos sobre las novedades que va a tener, sobre todo los comentarios que se hacen sobre los nuevos profesores y su supuesta severidad.
- Libertad de expresión.
- Además de las medidas anteriores, debemos tener en cuenta que muchos niños viven esta transición con temor, por ello, debemos dejar que exprese qué siente, que ponga nombre a sus sentimientos, los identifique y como padres, debemos escuchar sin criticar, sin juzgar, dejándole que se exprese.
- Los primeros días de clase.
- Es importante que estemos especialmente atentos los primeros días de clase a los comentarios que nos hace referentes a la escuela, debemos compartir con el niño sus experiencias (revisando libros, adquiriendo material para el nuevo curso...) y podéis animarle a que dedique un tiempo al día a tareas en casa para empezar a crear el hábito de estudio.
- Un añadido que debemos tener en cuenta cuando hablamos de niños con TDAH o dificultades de aprendizaje asociadas es transmitir toda la información relativa al niño, al tutor y orientador del centro incluso antes de que acabe el curso académico anterior. Ellos celebran reuniones de coordinación entre infantil y primaria para facilitar la transición, pero toda información que la familia pueda facilitar al respecto, ajustará la respuesta educativa al alumno, tan importante en etapas tempranas.
Bibliografía
Adaptación del material de Jesús Jarque García
CASAMAYOR, G. (2007) Los trucos del formador: arte, oficio y experiencia. Madrid: GRAÓ.
Fundación CADAH (2018)
