El
TDAH es un trastorno neurobiológico caracterizado por una dificultad o incapacidad de mantener la atención voluntaria en actividades académicas y cotidianas, así como para controlar sus conductas.
Existen diferentes tipos de atención que responden a circuitos cerebrales diferentes. Dos de ellos, serían las atención sostenida y la selectiva, ambas afectadas en mayor o menor grado en los niños con TDAH
Por ello, a continuación expondremos qué es lo que se entiende por
atención sostenida y selectiva, cómo reconocer en estos niños ese déficit de atención y algunas estrategias para trabajarlo.
¿Qué es la atención sostenida y la atención selectiva?
- La atención selectiva es aquella que nos permite centrarnos únicamente en la información que suponemos es importante, desechando aquella que resulta irrelevante. Actuaría a modo de "filtro" para que nuestro cerebro no se sature con tanta carga de información.
- La atención sostenida sería aquella que pondría en marcha la actividad en el cerebro para mantener el foco atencional y permanecer con ello durante la realización de tareas monótonas durante un periodo de tiempo relativamente largo.
¿Cómo acusan los niños con TDAH el déficit de atención?
- Incapacidad para prestar atención.
- Cometen errores frecuentemente.
- Dificultad para realizar tareas complejas.
- Pierden cosas, son muy olvidadizos.
- Disminución del rendimiento académico, debido a ese déficit de atención frente a las tareas escolares.
- Dificultades en el entorno social y familiar.
¿Qué juegos podemos hacer con los niños para desarrollar la atención sostenida?
- Ensartar bolas de distintos colores en un orden fijo. Le daremos diferentes modelos para que el niño los vaya reproduciendo, graduando su dificultad.
- El intruso. Se le proporcionan al niño de manera hablada o escrita cuatro palabras de las cuales una de ellas no guarda relación con el resto. Deberá descubrir cuál de ellas es.
- Se le dará al niño una hoja con muchos animales que se parecen entre sí pero que poseen características diferentes ( unos tienen pico, otros no, unos cuatro patas, otros dos…) deberá de redondear sólo los que le pidamos.
- Se le proporcionará al niño una hoja con muchos redondeles en línea. Deberá de pintarlos del color que quiera, pero yendo de uno en uno, sin saltarse ninguno.
- El famoso `Cubo de Rubik` es un juego idóneo para trabajar la atención sostenida con niños con TDAH.
- Podemos encontrar actividades muy lúdicas pero que requieren de los niños con TDAH un sobreesfuerzo al tener que mantener su atención de manera prolongada, este es el caso de las películas. Por ello, será aconsejable graduarlas en tiempo, y después de las mismas hacerles preguntas acerca de la misma para valorar la atención prestada.
¿Qué juegos podemos hacer con los niños para desarrollar la atención selectiva?
- ¿Quién no ha jugado alguna vez a las cartas de las familias del mundo? Es un divertido juego que tiene como objetivo juntar a familias de diferentes culturas a la vez que nos sirve como pretexto para trabajar la atención sostenida.
- Jugar a cruzar laberintos, bien sea en soporte papel o digital.
- Contar las diferentes figuras geométricas desordenadas y superpuestas en una hoja, es una manera muy buena para trabajar este tipo de memoria.
- El juego de buscar las 7 diferencias.
- Unir ordenadamente los números para formar un dibujo.
- También podemos jugar con nuestros hijos al juego de las palabras encadenadas, al dominó, al veo veo, haciendo sudokus, crucigramas...
Concluyendo, hemos podido comprobar a lo largo de este artículo, que de manera lúdica y divertida podemos ayudar a los niños que presentan un déficit en la atención a trabajar sobre ella. Muchas veces, pueden pasarnos inadvertidos muchos juegos que sin saberlo, al utilizarles estaremos ayudando al niño en el desarrollo de la concentración y la distribución y estabilidad de la atención.
Lucía Osorio Quintana. Fundación CADAH (2015)
Webgrafía:
Bibliografía:
`Desarrollo de los procesos atencionales mediante «actividades adaptadas`. Luis Álvarez, Paloma González-castro, José Carlos Núñez, Julio Antonio González-Pienda , David Álvarez y Ana Bernardo (Universidad de Oviedo)