Destacado

Para que se produzca cualquier tipo de aprendizaje es necesaria la interacción social ya sea entre los alumnos o entre los alumnos y el profesor. Esta interacción va a favorecer tanto el desarrollo cognitivo como el desarrollo socioafectivo del alumnado.
En las últimas décadas se ha producido un cambio de paradigma en el proceso de enseñanza-aprendizaje: el alumno pasa a considerarse un agente activo de su proceso de aprendizaje. Por lo tanto, cambian los roles que desempeñan tanto el profesor como el alumno. En la actualidad el profesor se convierte en un facilitador del proceso de aprendizaje, ya que debe ser capaz de diseñar actividades que posibiliten la resolución de problemas, la aplicación de los conocimientos aprendidos y la promoción de la actividad de los estudiantes. Solamente de esta manera se consigue un auténtico aprendizaje significativo.

Características de las actividades de trabajo bajo este nuevo paradigma:
- Deben promover la reflexión crítica
- El pensamiento creativo
- La comunicación efectiva con sus compañeros.
- Debe lograrse por medio de la experimentación.
- Incrementa la motivación del estudiante en el aprendizaje.

Johnson y Johnson (1987) realizó un estudio en el que describió 3 formas de estructurar la clase. Diferentes estructuras de las actividades de enseñanza-aprendizaje:

1. Individualista:
 

Este tipo de estructura es típica del aula tradicional. Favorece la individualidad y la pasividad del alumno, ya que se considera que el aprendizaje es un proceso individual en el que el alumno debe progresar independientemente del resto de sus compañeros. El profesor actúa ante el grupo como si fuese un todo homogéneo, por lo que la intervención educativa es la misma para todos y sigue el siguiente esquema:

- Exposición.
- Memorización.
- Verbalización de lo memorizado a través de una prueba oral o escrita.
- Evaluación del resultado.

2. Competitiva:

El alumno progresa si, y solo si, los demás miembros del grupo no lo hacen. Bajo esta estructura el alumno alcanzará sus objetivas en la medida que el resto de sus compañeros no lo hacen. Los alumnos compiten entre ellos por ver quién aprende más.

3. Cooperativa:

Se fomenta el trabajo en equipo ya que los alumnos trabajan juntos de forma coordinada.Los alumnos son los protagonistas de un aprendizaje constructivo y significativo.Los alumnos mejoran su capacidad de comprensión y expresión oral y se favorece la confrontación de diferentes puntos de vista.

Pero, ¿qué entendemos por aprendizaje cooperativo?

Es un modelo de organización de aula que crea una estructura y dinámica grupal de aprendizaje, según la cual, la adquisición de los conocimientos es fruto de la interacción y la cooperación entre iguales. La cooperación supone que cada miembro del grupo solamente alcanzará sus objetivos en la medida que los demás miembros del grupo alcance los suyos. De esta forma, los éxitos individuales se basan en el éxito del grupo y el éxito individual contribuye al éxito del equipo. El aprendizaje no es el mismo para todos, sino que cada uno alcanzará aquel que se ha propuesto en relación con su nivel, capacidad y pacto con el docente

Es muy importante diferenciar el trabajo en grupo del trabajo cooperativo. Tal y como manifestó Ovejero (1990) `todo aprendizaje cooperativo es aprendizaje grupal pero no todo aprendizaje grupal es aprendizaje cooperativo`. El trabajo cooperativo es una forma de organización del aula, en la cual, el grupo consigue sus objetivos, si y solo si, cada miembro de manera individual alcanza sus propios objetivos. Los grupos cooperativos son la máxima expresión de la interdependencia positiva entre sus miembros.

Requisitos que debe cumplir una estructura de trabajo cooperativo:
- Heterogeneidad en la composición del grupo:
- Responsabilidad individual e igualdad de oportunidades para el éxito
- Ventajas del aprendizaje cooperativo:
- Mejora la motivación por el aprendizaje de los estudiantes
- Debido a la interacción entre compañeros, los alumnos aprenden valores, actitudes o habilidades que no siempre obtienen de los adultos.
- Los alumnos aprenden a ver situaciones y problemas desde otro punto de vista que no es el suyo propio.
- Posibilita una mayor interdependencia y comunicación entre sus miembros

Algunas de las técnicas más usadas de aprendizaje cooperativo son las siguientes:
- Rompecabezas (jigsaw).
- Grupos de investigación.

Diferentes investigaciones realizadas a posteriori, concluyen que el aprendizaje cooperativo, es superior en aquellas variables relacionadas con los aspectos socializadores y el rendimiento académico.

La LOE (2006), incluye una referencia a la importancia del trabajo en equipo cuando desarrolla los objetivos de la ESO y el bachillerato. En la legislación de Cantabria, en el Decreto 38/2015, que establece el currículo de la Educación Secundaria Obligatoria y el Bachillerato en Cantabria, en su artículo 12 dónde se establecen las orientaciones metodológicas de la Educación Secundaria Obligatoria, establece que la metodología será fundamentalmente activa y participativa, favorecerá el trabajo individual, el colaborativo y el cooperativo y la reflexión tanto individual como grupal de los alumnos en el aula. Desde esta perspectiva, se promoverá el aprendizaje interdisciplinar de investigación basado en la solución de problemas, los métodos de trabajo cooperativo y los grupos interactivos.

Elena Sánchez (2018)

Bibliografía:

García, R., Traver, J. A. y Candela, I (2001). Aprendizaje cooperativo. Fundamentos, características y técnicas. Madrid. CCS.
Lobato, C (1998). El trabajo en grupo. Aprendizaje cooperativo en secundaria. Bilbao. Universidad del País Vasco.

Legislación:
Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de educación, LOE.
Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, de mejora de la calidad educativa, LOMCE.
Decreto 38/2015, de 22 de mayo, que establece el currículo de la Educación Secundaria Obligatoria y el Bachillerato en la Comunidad Autónoma de Cantabria.