Desarrollo personal del adolescente y el adulto con TDAH
Una persona afectada de TDAH es mucho más que un TDAH. Hay que enseñarles a no confundirse con su trastorno.
El Desarrollo personal es el proceso que permite avanzar por el "camino" para llegar a lo que quieres ser.
Es un "camino" que puedes ir creando, atendiendo siempre a:
En ocasiones los individuos NO tienen claro hacia dónde quieren ir.
Esto se aprecia en los adolescentes, donde tienen grandes conflictos y disonancias sobre los que quieren y deberían, o lo que no deberían hacer, pero no sabes evitar, etc. En el caso de los adolescentes y adultos con TDAH, este hecho se incrementa debido precisamente a esas conductas (impulsividad, ausencia de flexibilidad, falta de crítica, dificultad para anticipar consecuencias y elaborar alternativas, etc.)
De aquí que en el caso de los adolescentes y adultos, en muchas ocasiones, requieran de una intervención terapéutica no sólo para ayudarles a avanzar por el "camino" para llegar a lo que quieren ser, sino que incluso en necesario apoyarles para que descubran cual de todos es SU CAMINO.
El proceso del Desarrollo Personal como estrategia terapéutica implica:
En el trabajo sobre Desarrollo Personal se elabora un COMPROMISO de mejora definido a partir del análisis de necesidades.
Este COMPROMISO significa que cuando (inevitablemente) tropieces o te salgas del camino, te levantarás, te orientarás y seguirás adelante en la dirección que quieres seguir. Es fundamental hacerles ver que nunca pueden saber de antemano si conseguirán o no sus objetivos, lo único que pueden hacer es seguir avanzando en una dirección que valoran y es importante para ellos (y por tanto, dirigen hacia ella su camino e interés), ya que a pesar de que tienen control sobre el futuro, sí lo tienen sobre sus actos en el presente.
Estrategias para mejorar y trabajar el Desarrollo Personal:
Qué pueden hacer las familias para ayudar a los Adolescentes y los Adultos con TDAH
Muchas familias asumen que el niño, adolescente o adulto con TDAH no tiene horizonte, o es un horizonte irreal. Y es en este contexto en el que construimos la terapia.
Cuando intervenimos con estos afectados, debemos atender también a este asunto. No sólo a CÓMO funciona la familia o pareja del sujeto, sino A DÓNDE quieren ir (cuales son sus objetivos, sus retos, sus horizontes). En ocasiones, debemos trabajar con la familia y la pareja sobre las expectativas ideales y las expectativas reales de su familiar, pareja afectado.
FUENTE:
Santos de la Rosa, A. (2012). Funcionamiento Ejecutivo y Autorregulación de las Emociones en el TDAH. III Jornadas TDAH Asociación ALENHI (León).