¿Por qué rechazan la lectura los niños con hiperactividad? Errores comunes y estrategias
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Es muy frecuente que los niños con hiperactividad muestren un rendimiento académico bajo, inferior al correspondiente a su edad. El TDAH suele ir asociado a dificultades de aprendizaje, especialmente en lectura, escritura, cálculo y matemáticas. Los niños hiperactivos se encuentran desmotivados hacia la lectura ya que las dificultades que conlleva, hace con frecuencia que se frustren y/o fatiguen sin lograr buenos resultados.Â
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Factores que influyen en la desmotivación lectora
- Dificultad reiterada, fatiga y fracasos anteriores.
- Dificultad para mantener la atención ante tareas largas (como puede ser la lectura de un texto), lo que se traduce en la incapacidad para inhibir la distracción en tareas que demandan un procesamiento continuado.
- Dificultades relacionadas con la integración del lenguaje:
- Comprensión lectora deficiente: La capacidad lectora constituye una capacidad compleja que incluye comprensión del significado de las palabras, frases, párrafos y textos. Las dificultades que encuentran los niños con hiperactividad se traducen en una mala comprensión de textos escritos (lecturas), o comprensión deficitaria de las instrucciones que acompañan a las tareas.
- Pérdida ante la lectura. Sobre todo se manifiestan durante la lectura grupal en clase, cuando ante la demanda del maestro para que lean responden: "¿por dónde vamos?" o en las lecturas silenciosas. Para ello a veces el niño utiliza el dedo para seguir los renglones y evitar saltarse lÃneas al leer.
- Lectura lenta, silabeada o precipitada: en algunas ocasiones nos encontramos niños que o bien su lectura es lenta y el niño va leyendo sÃlaba a sÃlaba (silabeada) o por el contrario leen de manera rápida, sin respetar los signos ortográficos, saltándose palabras o incluso frases enteras (precipitada).
Estrategias ante las dificultades
Estrategia para las dificultades en el lenguaje (omisiones, sustituciones, adiciones): Premiamos con una ficha cada dos, tres o cuatro palabras bien leÃdas, esto favorecerá el incremento de su atención en la lectura y los errores se reducirán. Después de varias frases, se detendrá la lectura y se cambiarán las fichas por algún premio previamente acordado.
Estrategia para la dificultad ante algunos grupos consonánticos (tr/bl/pr/bl/br): Entrenar deteniéndose diariamente unos minutos a leer tarjetas que contengan palabras con estos grupos consonánticos. Se juega a visualizar las letras y se representan por escrito, sobre la mesa, con el dedo, etc.
También podemos trabajar la articulación de estos grupos consonánticos a través de la realización de sonidos con los mismos (por ejemplo: /br/ puede ser el sonido del motor de un coche o moto "bruuuuuuum, bruuuuuuuum")
Estrategia para la comprensión lectora deficiente: Conviene entrenar al niño para que, ante cualquier instrucción escrita, rodee con un cÃrculo la palabra o palabras que le indiquen la acción o acciones que tiene que llevar a cabo para resolver la tarea y las realice de una en una en el orden en el que van apareciendo. Por ejemplo: Une las palabras de la derecha con las de la izquierda y tacha las que sobran. (Primero hemos subrayado las palabras que indican las acciones a realizar, en segundo lugar realizaremos la acción de unir y por último, la acción de tachar.Â
Estrategias para la pérdida ante la lectura: Permitir el uso de un cartón plastificado, que puede confeccionar el mismo niño y que situará bajo las lÃneas del texto a medida que se va leyendo, con el fin de evitar tantas pérdidas y ayudar al niño a que no le resulte tan dificultoso incorporarse a la lectura una vez "vuelve" de la distracción. Asà mismo, saber previamente qué parte del texto le corresponde leer en clase le permitirá practicar en casa e incrementará su nivel de atención durante la lectura en grupo, a la vez que se sentirá más motivado. Para practicar en casa también podemos hacerle leer en voz alta, lo que le ayudará a no distraerse.
En el caso de niños que siguen la lectura con el dedo, debemos utilizar lecturas fragmentadas tomadas del "Programa para el entrenamiento lector, PROLEC 90 publicado por el ayuntamiento de Valencia y realizado por José Luis López Rubio. De este modo haciendo leer al niño un texto fraccionado una vez al dÃa favoreceremos la coordinación ocular y evitaremos la costumbre de leer con el dedo.
Estrategias para la lectura lenta o silabeada: Utilizar un metrónomo para evitar el silabeo. Se empezará leyendo a una velocidad muy lenta para ir incrementándola. Primero, cada ritmo marcará una sÃlaba para marcar palabras más adelante. Otro método consiste en lectura cronometrada para aumentar en velocidad; es decir; el niño lee durante un minuto y se marcará con una lÃnea hasta dónde llega. Vuelve a leer el mismo texto otro minuto y se marcan dos rayitas, finalmente se vuelve al inicio y se cronometra otro minuto y se marcan tres rayitas. Se contará el número de palabras leÃdas durante cada minuto anotándolo en un registro. Normalmente se registrará un mayor número de palabras en el tercer minuto, superando los dos anteriores, aspecto muy gratificante para el niño. También, podemos hacer un registro diario pidiéndole al niño que lea en voz alta todas las palabras que pueda durante un tiempo total de 2 minutos cronometrados y reflejar las palabras bien leÃdas en una gráfica:
Estrategias para la lectura precipitada: En el caso de lectura precipitada, que no respeta los signos de puntuación, se puede marcar con un metrónomo la siguiente norma: "se dejará pasar un ritmo delante de las comas, dos delante de los puntos y tres delante de los puntos y aparte".
BIBLIOGRAFÃA
Orjales Villar, I. (2011). Déficit de atención con hiperactividad. Manual para padres y educadores. Edit. CEPE.
B. Mena, Pujol et col (2006). GuÃa práctica para educadores. El alumno con TDAH. Edit. Mayo Ediciones.